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 ¿Cómo integrar la IA en mis clases?

  • 28 abr
  • 3 Min. de lectura

Es un hecho que la IA llegó y es usada por estudiantes, no podemos evitarlo y sin duda es una herramienta que si la sabemos focalizar y acompañar al estudiantado, puede ser una herramienta poderosa para fortalecer y ampliar el aprendizaje en aula. 



Ante el creciente uso de la IA, hay instituciones educativas que buscan integrarla a sus procesos con el fin de agilizar tareas académicas y administrativas. Por ejemplo, algunos docentes la emplean para diseñar planeaciones didácticas, mientras que estudiantes la utilizan para generar citas en formato APA. Sin embargo, esta incorporación también ha generado inquietudes: por un lado, el profesorado teme ser reemplazado; por otro, los propios estudiantes manifiestan desconfianza frente a posibles errores o “alucinaciones” generadas por los sistemas de IA.


El Dr. Abraham Lira, docente, investigador y tesiasesor quien ha tenido experiencia en capacitaciones con docentes que desean incorporar la IA en su labor, nos compartió cinco recomendaciones para que las instituciones educativas integren sin miedo la inteligencia artificial de forma ética, pedagógica y situada.


La IA se ha convertido en una herramienta central para el avance del conocimiento científico, desde la mejora en procesos de investigación hasta el desarrollo de metodologías más eficientes. Sin embargo, su uso también ha abierto un debate profundo sobre los límites éticos, pedagógicos y sociales de su incorporación en la educación y la investigación.


En entrevista con Tesicafé, el Dr. Abraham Lira señala que uno de los principales retos para docentes e investigadores al incorporar estas herramientas radica en el bajo nivel de apropiación tecnológica y la resistencia al cambio: “la resistencia o el miedo a mostrar vulnerabilidad frente a los otros es clave”. A esto se suma la necesidad de comprender cómo funcionan los sistemas de IA y los sesgos que pueden reproducir, los cuales, como menciona, no son solo técnicos, sino también personales y culturales.


Como indica la Gaceta UNAM, “la IA ha emergido como un elemento crucial en la transformación de la investigación científica”, aunque su integración requiere de conocimientos técnicos y éticos sólidos para no comprometer la autonomía del investigador.


La Universidad de Castilla-La Mancha también advierte que la IA, si bien optimiza procesos como la búsqueda bibliográfica o la generación de contenidos, debe usarse con responsabilidad, transparencia y conciencia de sus implicaciones éticas, especialmente en lo relativo a la privacidad de datos y la integridad académica.


Para enfrentar estos desafíos, el Dr. Lira propone cinco recomendaciones dirigidas a instituciones educativas que buscan integrar la IA sin miedo, promoviendo una alfabetización crítica:


  1. Iniciar con procesos de alfabetización crítica en IA. No basta con enseñar a usar herramientas como ChatGPT; es necesario comprender cómo funcionan, qué sesgos pueden contener y cuáles son sus límites.

  2. Promover la autoría consciente y el pensamiento metacognitivo. El uso de IA no debe reemplazar los procesos cognitivos, sino potenciarlos. Es clave que estudiantes y docentes identifiquen cuándo, cómo y por qué recurren a estas herramientas.

  3. Integrar la IA en la planeación y evaluación didáctica. Capacitar a docentes en el uso de IA para crear recursos (rúbricas, simulaciones, mapas conceptuales, cuestionarios, entre otros) puede reducir la carga administrativa y personalizar el aprendizaje. 

  4. Establecer lineamientos éticos claros y participativos. Las normativas deben incluir criterios para el uso transparente de la IA, citación adecuada, privacidad de datos y mecanismos para prevenir el plagio.

  5. Crear comunidades de práctica para la innovación pedagógica con IA. No se trata solo de dar talleres aislados, sino de fomentar espacios interdisciplinarios donde se compartan experiencias, aprendizajes y buenas prácticas.


México, como país clasificado entre los “adoptantes” de IA según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) en el índice latinoamericano de inteligencia artificial (ILIA), tiene avances moderados en políticas e investigación, pero aún enfrenta retos significativos para consolidar un ecosistema ético y sostenible. En este panorama, iniciativas como la de Tesicafé y la visión crítica del Dr. Lira resultan fundamentales para pensar una integración de la IA que no reemplace el pensamiento, sino que lo fortalezca desde la reflexión y la práctica. 


Si deseas profundizar en cómo integrar la IA en la educación, puedes ver la grabación de la masterclass del Dr. Lira, “IA para docentes: automatiza recursos y materiales”, disponible en parte uno y parte dos


Esta nota fue desarrollada con ayuda de inteligencia artificial (ChatGPT) para mejorar su redacción. No obstante, hubo intervención humana en el proceso por parte de Ingrid Hernández Villanueva para las siguientes actividades: selección de información, redacción, adaptación del lenguaje, y supervisión y revisión del texto final (con ayuda de Angelina Mijares).


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